Destino. Coincidencia. Cosas que pasan. Suerte. Karma. Dios. No importa qué nombre ponerle ni gracias a qué o a quién. El caso es que te encontré. Curioso. Te encontré sin buscarte, inesperadamente, y me doy cuenta ahora de que encajas en aquello que nunca busqué pero siempre necesité sin saberlo. Lo más curioso es que en esos momentos estaba decidida a no enamorarme de nuevo, a no volver a amar como si me fuera la vida en ello. No quería sentir de nuevo esas jodidas mariposas porque sé que al final, nunca acaba bien. Pero llegas tú y me haces sentir mil cosas, me desbaratas, revolucionas mi vida, rompes los esquemas y haces felices mis días. Y ¿cómo negarme a ser feliz contigo? El amor llega en el momento más inesperado, cuando no lo buscas, incluso cuando no lo quieres. Y es eso, el placer de lo inesperado, lo que sabe mejor, lo que nos sorprende y nos llena de esperanza. Me fue imposible negar que cada día me gustabas más y me lancé de cabeza, como un salto en el vacío. Me arriesgué, y de momento gano cada día más. Porque contigo no hago más que reír y nunca tuve tantas ganas de vivir. No te esperaba, y sin embargo aquí estoy, aprendiendo a quererte con pies de plomo, porque no quiero equivocarme. Contigo no.
Y es que el amor mas dulce y mas explosivo es ese, el que no buscamos pero nos llega de repente, incluso cuando lo repulsamos por no querer volver a ser la tonta que sufre... Nadie sabe que pasará en el futuro, pero tampoco podemos desperdiciar lo que tenemos ahora por algo que ni siquiera sabemos, asi que si. Disfruta.
ResponderEliminarUn beso♥
Muchas gracias por tu comentario, me ha encantado y tienes toda la razón!
EliminarUn beso^^
Lindo y romántico poema amiga Marina, en este caso, segundas partes fueron mejor.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracia Priego!
EliminarUn beso^^